Error fatal de un médico
-Pues bien. Cuénteme con todo detalle su problema.
-Mire, lo que me ocurre es que últimamente, cuando voy caminando por la calle, tengo la impresión de que algo o alguien me sigue, pero no es eso lo único que me pasa, sino que cuando me giro para
comprobar que nadie me sigue puedo ver durante unos segundos una sombra que se oculta.
- ¿Y qué hizo usted al respecto? - dijo el doctor, que parecía sumamente interesado en el caso de Nuria.
-Pues qué iba a hacer. Echar a correr hacia mi casa despavorida y esconderme en ella muy asustada.
-Pues bien. Cuénteme con todo detalle su problema.
-Mire, lo que me ocurre es que últimamente, cuando voy caminando por la calle, tengo la impresión de que algo o alguien me sigue, pero no es eso lo único que me pasa, sino que cuando me giro para
comprobar que nadie me sigue puedo ver durante unos segundos una sombra que se oculta.
- ¿Y qué hizo usted al respecto? - dijo el doctor, que parecía sumamente interesado en el caso de Nuria.
-Pues qué iba a hacer. Echar a correr hacia mi casa despavorida y esconderme en ella muy asustada.
-Creo que tengo una ligera idea de lo que le sucede. Yo lo llamo "obsesión persecutoria". Ya
he tenido varios casos similares, y lo único que podría hacer es lo mismo que con los casos anteriores. Le daré una serie de pasos que usted deberá seguir la próxima vez que le suceda: lo primero que debe hacer cuando le ocurra será cerrar los ojos y repetir varias veces en voz baja "Esto no es real". Luego, gírese de repente y si vuelve a ver las sombras acérquese a ellas y enfréntese a sus miedos, entonces comprobará que nadie la sigue, sólo es su imaginación. Nuria salió a la calle no demasiado
convencida de que aquello fuese a funcionar, pero era lo único que podía hacer, por qué no intentarlo.
Ya era de noche, pasaba por la calle de santa Marta cuando volvió a ocurrir. Tuvo la impresión de que había alguien tras ella y, aunque estaba muy asustada, decidió hacer caso del doctor.
- Esto no es real, esto no es real, se dijo a sí misma mientras giraba de repente. Tal y como estaba temiendo, aquella sombra se ocultaba tras un coche no muy lejos de donde estaba.
Estaba muerta de miedo pero no había otra solución, así que empezó a caminar lentamente hacia el coche. Ya estaba cerca, casi había legado, sólo le faltaba un paso.
¡¡Aaaaaaah!!
El doctor Martínez abrió el periódico, como todas las mañanas para hojearlo mientras tomaba su delicioso café con leche, cuando un grito de horror salió de su boca al ver la fotografía de la chica acompañada de un escalofriante titular:
"Nuria Sandoval, asesinada a manos de su ex marido, que andaba persiguiéndola desde hacía semanas, tras ser sorprendida por él tras un coche."
-¡Oh, no! -- dijo el doctor sin poder creer lo que leía.
he tenido varios casos similares, y lo único que podría hacer es lo mismo que con los casos anteriores. Le daré una serie de pasos que usted deberá seguir la próxima vez que le suceda: lo primero que debe hacer cuando le ocurra será cerrar los ojos y repetir varias veces en voz baja "Esto no es real". Luego, gírese de repente y si vuelve a ver las sombras acérquese a ellas y enfréntese a sus miedos, entonces comprobará que nadie la sigue, sólo es su imaginación. Nuria salió a la calle no demasiado
convencida de que aquello fuese a funcionar, pero era lo único que podía hacer, por qué no intentarlo.
Ya era de noche, pasaba por la calle de santa Marta cuando volvió a ocurrir. Tuvo la impresión de que había alguien tras ella y, aunque estaba muy asustada, decidió hacer caso del doctor.
- Esto no es real, esto no es real, se dijo a sí misma mientras giraba de repente. Tal y como estaba temiendo, aquella sombra se ocultaba tras un coche no muy lejos de donde estaba.
Estaba muerta de miedo pero no había otra solución, así que empezó a caminar lentamente hacia el coche. Ya estaba cerca, casi había legado, sólo le faltaba un paso.
¡¡Aaaaaaah!!
El doctor Martínez abrió el periódico, como todas las mañanas para hojearlo mientras tomaba su delicioso café con leche, cuando un grito de horror salió de su boca al ver la fotografía de la chica acompañada de un escalofriante titular:
"Nuria Sandoval, asesinada a manos de su ex marido, que andaba persiguiéndola desde hacía semanas, tras ser sorprendida por él tras un coche."
-¡Oh, no! -- dijo el doctor sin poder creer lo que leía.
